¿Vamos a jugar?

¿Qué comemos hoy? ¿Quién quiere comer pescado? Primero debemos lavar los alimentos y luego cortarlos.

Lo elegimos porque…

Ideal para trabajar la motricidad fina e ir introduciendo a los peques en el cortado de alimentos. Es un divertido juego didáctico que fomenta el juego simbólico, es una forma de juego que favorece la construcción de conocimientos, promueve la creatividad e imaginación, y desarrolla la autonomía de tu peque. Aprenderá a través de sus experiencias y sus historias de chef.

Es un excelente recurso para jugar en grupo, fomentando la socialización y desarrollando así las habilidades básicas de comunicación, cooperación y colaboración, así como mejora el lenguaje.

Podemos enseñar a diferenciar los tipos de alimentos y apreciar lo importante que es la comida y sus beneficios.